El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió hoy, desde Palacio Nacional, su decisión de compartir el número telefónico de Natalie Kitroeff, corresponsal del New York Times, afirmando que “lo volvería a hacer”.
Durante su conferencia matutina el mandatario fue cuestionado por la periodista Jessica Zermeño por la divulgación de datos personales de la periodista del NYT, a lo que rechazó las acusaciones de que su acción constituyó un error, afirmando rotundamente que lo repetiría en circunstancias similares. El ejecutivo argumentó que la plataforma de “La Mañanera” es un espacio público y, por ende, el intercambio de información en este contexto no puede ser considerado como una violación de privacidad.
En palabras del Presidente: “Sí, lo volvería a hacer. No fue un error porque esto es un espacio público y nosotros estamos aquí aplicando un principio de transparencia.”
La controversia surgió a raíz de una nueva investigación publicada por el New York Times, en la que se vincula a familiares y colaboradores cercanos del Presidente mexicano con el narcotráfico. Ante esta situación, López Obrador expresó su descontento y afirmó que se trató de una respuesta a lo que considera calumnias por parte de ciertos sectores de la prensa.
Además, López obrador aprovechó la oportunidad para criticar a los medios de comunicación que, según él, muestran parcialidad y cercanía con los poderes económicos y políticos, enfatizando en la necesidad de un periodismo imparcial y objetivo.
El presidente arremetió: “Tengan capacidad para la autocrítica y bájenle una rayita a su prepotencia.”
“Cuando se trata de un asunto en donde está de por medio la dignidad del presidente de México. Por encima de la ley, está la autoridad moral y la autoridad política, y yo represento a un país y un pueblo que merece respeto. No va a venir cualquiera y nos va a sentar en el banquillo de los acusados, eso era antes… ahora no. Nos tienen que respetar, somos autoridad”, advirtió López obrador.
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