Los enfrentamientos entre civiles armados y miembros del Ejército mexicano habían ido en aumento en los últimos años, y para ejemplo basta recordar los ataques armados en contra de las fuerzas militares en China, Nuevo León o San Luis Río Colorado, Sonora.
Sin embargo y a pesar de estos episodios, las estadísticas muestran una tendencia favorable para las Fuerzas Armadas. Y es que según una investigación de MILENIO basada en datos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), las agresiones contra militares no han aumentado durante la presente administración, sino que han disminuido en un 20 por ciento.
Vale la pena recordar que durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se registraron mil 339 ataques en enfrentamientos con el crimen organizado, comparado con los mil 688 del sexenio anterior.
Asimismo, los datos revelan además que la incidencia de soldados heridos ha disminuido un 28 por ciento, y los asesinatos han bajado un 13 por ciento en comparación con el gobierno anterior.
Javier Oliva Posada, coordinador del Seminario Universitario de Estudios sobre Democracia, Defensa, Seguridad e Inteligencia de la UNAM, sugiere que este descenso podría estar relacionado con el incremento de la actividad de la Guardia Nacional, la cual cuenta con unos 130 mil elementos dedicados a labores de seguridad pública.
“De alguna manera han relevado, no del todo, en algunas tareas a los elementos del Ejército mexicano”, apunta Oliva Posada.
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