En los pasillos del Congreso se comenta que los legisladores de Movimiento Ciudadano ya le midieron el pulso al Presupuesto de Egresos 2026 y no dudaron en soltar la bomba: Morena presume que sacó a 15 millones de mexicanos de la pobreza, pero los condena a otra igual de dura, la de no tener acceso a la salud. Dicen que mientras el gobierno federal acumula una deuda histórica de más de 17 billones de pesos, a los hospitales se les aprieta la cartera. Los naranjas también cuestionan la incongruencia: el IEPS se endurece para refrescos, cigarros y hasta videojuegos, bajo la bandera de impuestos “saludables”, pero al alcohol ni lo tocan. MC, pues, se anota un tanto político al señalar lo que en Palacio Nacional prefieren callar: menos dinero para la salud y más deuda para todos.
ADÁN AUGUSTO, ENTRE RUMORES Y “MAFUFADAS”
El senador tabasqueño salió al paso de versiones que lo pintan renunciando al liderazgo de la bancada morenista. “Ese es un rumor que usted difunde”, dijo entre dientes y con visible molestia. Pero la cosa no para ahí: Alito Moreno asegura que ya hay denuncias en su contra en el mismísimo FBI. Adán Augusto, imperturbable, lo desestimó como simple “mafufada”. Mientras tanto, las miradas siguen puestas en lo que pueda decir Hernán Bermúdez Requena, su ex secretario de Seguridad Pública. Y para rematar, otra vez corrigió a sus compañeros de bancada: la semana pasada fue Javier Corral, hoy otro desliz interno. ¿El jefe de Morena en el Senado aguanta la presión o ya se tambalea la silla?
BALACERA TOCA AL CÍRCULO DEL GOBERNADOR ROCHA
En Sinaloa, la violencia rozó de cerca al gobernador Rubén Rocha. Un vehículo en el que viajaba su nieta fue atacado a balazos en Culiacán. Ella salió ilesa, pero dos escoltas resultaron heridos. El ataque, en plena avenida, dejó incluso un autobús de pasajeros atrapado en el fuego cruzado. La zona tuvo que ser blindada por Ejército, Marina, Guardia Nacional y Policía Estatal. Un recordatorio brutal de que en el corazón de Sinaloa la violencia sigue respirando a sus anchas, sin importar rangos ni parentescos.