La reelección de Rosario Piedra Ibarra al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha sido fuertemente criticada por Movimiento Ciudadano en el Senado, que acusa un desempeño lamentable y sumiso al poder en los últimos cinco años.
La bancada naranja en el Senado de la República, encabezada por Clemente Castañeda, calificó esta decisión como un retroceso para la protección de los derechos humanos en México.
“La gestión de Rosario Piedra ha sido reprobable. Su reelección es una afrenta a la nación; no tiene mérito ni profesional ni personal. Ha sido un tapete del poder y una tapadera de las violaciones sistemáticas a los derechos humanos”, afirmó Castañeda, quien también destacó que las otras dos candidatas en la terna, Nashieli Ramírez y Paulina Hernández Diz, cuentan con un perfil adecuado y comprometido con las víctimas, a diferencia de Piedra Ibarra.
Por su parte, Alejandra Barrales, vicecoordinadora de Movimiento Ciudadano, recordó que Piedra Ibarra obtuvo la calificación más baja en las comisiones unidas que evaluaron a los aspirantes, señal de que incluso dentro de Morena su reelección era cuestionada.
“Esta decisión será muy costosa para los miles de familiares de personas desaparecidas y para quienes han sido víctimas de violaciones a derechos humanos”, advirtió Barrales.
En la misma línea, la senadora Amalia García subrayó que México necesita una CNDH que rechace la militarización y que defienda a las víctimas, un principio que la madre de la actual titular, Rosario Ibarra de Piedra, siempre apoyó.
“Hoy lo que se requiere es reconstruir la CNDH y fortalecer su compromiso con los derechos humanos, no mantenerla como un órgano complaciente”, puntualizó.
Para Movimiento Ciudadano, la CNDH ha perdido su esencia autónoma y ha caído en un silencio cómplice, mientras la militarización se intensifica y las víctimas quedan desprotegidas. La reelección de Rosario Piedra, aseguran, es una traición a quienes esperan justicia.