La Ciudad de México reintrodujo oficialmente la expedición de la licencia de conducir permanente, una medida que había sido suspendida durante varios años y que volvió como parte de las primeras acciones de gobierno de Clara Brugada Molina.
Según la Secretaría de Movilidad (Semovi), el nuevo esquema de licencia permanente se inscribe en una estrategia de simplificación burocrática, pero con medidas de control más estrictas. El documento tiene un costo de 1,500 pesos y podrá tramitarse hasta el 31 de diciembre de 2025 en módulos autorizados como las instalaciones de Semovi, PILARES, Utopías y otros puntos habilitados en la ciudad.
El proceso distingue entre personas que ya cuentan con una licencia vigente en la capital y quienes la solicitan por primera vez:
- Renovación: Solo se requiere el pago de la línea de captura, sin necesidad de presentar exámenes adicionales.
- Primera vez: Es obligatorio aprobar un examen de conocimientos sobre conducción.
No todas las personas podrán acceder a esta modalidad. El titular de Semovi, Héctor Ulises García Nieto, detalló que quienes tengan antecedentes por delitos viales o hayan sido sancionados por el programa “Conduce sin Alcohol” estarán excluidos del beneficio.
La jefa de Gobierno dejó claro que el regreso de la licencia permanente no implica una carta blanca para los automovilistas. A la par, se anunció el fortalecimiento de políticas públicas orientadas a la seguridad de peatones y ciclistas. Además, el gobierno capitalino trabaja en un modelo híbrido de sanciones que combinará distintos mecanismos de control vial, lo cual busca reducir siniestros y mejorar la convivencia en las calles.
El trámite estará disponible únicamente hasta el 31 de diciembre de 2025, y hasta ahora no se contempla una prórroga. Las autoridades instaron a la ciudadanía a cumplir con los requisitos y no esperar hasta el último momento para realizar el trámite.
