Con entusiasmo y orgullo, la Universidad Nacional Autónoma de México anunció que cuatro aspirantes obtuvieron puntaje perfecto —120 aciertos— en el examen de ingreso para el ciclo escolar 2025‑2026. Tres mujeres y un estudiante lograrán cursar dos de las licenciaturas más demandadas: Medicina e Ingeniería Aeroespacial.
Los protagonistas de esta hazaña académica
Anna Sofía Pérez Gordillo, de Ecatepec, Estado de México, soñaba con entrar a la UNAM desde los siete años, cuando recorría Ciudad Universitaria con su mamá. Estudió en la Preparatoria 9 Pedro de Alba y, aunque su promedio no fue suficiente para el pase reglamentado, persistió: “Este fue mi tercer intento” hasta lograr la calificación perfecta. Estudiará Médico Cirujano en la Facultad de Medicina.
Daniela Villalobos Camacho, de la Ciudad de México, será la primera persona de su familia en ser admitida en la UNAM. Igual que Anna Sofía, consiguió 120 aciertos tras dos intentos, pues en la primera se quedó apenas a seis aciertos. También estudiará la licenciatura de Medicina.
Lizette Jacqueline Cruz Gómez, originaria de Ocosingo, Chiapas, obtuvo el puntaje perfecto para estudiar Ingeniería Aeroespacial en la Facultad de Ingeniería. Relata que su éxito es fruto de disciplina y constancia: “Un puntaje no nos define… de eso se trata la vida de fallar y volver a intentarlo”.
Bruno García Gómez, también del área metropolitana de la Ciudad de México, compartirá esa carrera con Lizette. Destaca que el esfuerzo invertido en largas sesiones de estudio dio fruto y que cursar Ingeniería Aeroespacial en la UNAM—una de las pocas universidades en México que la ofrece—es un orgullo personal y académico.
Disciplina, constancia y la determinación de no desistir
Los cuatro coinciden en que alcanzar el puntaje perfecto fue fruto de preparación intensa. Anna Sofía enfrentó tres intentos, Daniela y Lizette dos, y cada uno reconoce que en el camino hubo momentos de duda. Pero se recordaban a sí mismos el apoyo familiar, su meta y por qué comenzaron ese esfuerzo. “No lo voy a negar: hubo días en que ya no quería seguir […] pero recordaba a mis papás, cuál era mi meta y de ahí agarraba fuerza y motivación para continuar”, comentó Anna Sofía.
El mensaje que comparten es alentador: una calificación no define a nadie, pero luchar por tus sueños con dedicación hace la diferencia. “Este logro es producto de la disciplina, constancia y sesiones de estudio”, enfatizaron Lizette y Bruno.
Un nuevo capítulo en Ciudad Universitaria
Con la generación entrante de 48 560 nuevos estudiantes, incluyendo casi 20 mil jóvenes que ingresaron por concurso de selección, estas cuatro historias brillan por su excelencia. Lizette y Anna Sofía planean mudarse a Ciudad Universitaria para facilitar su adaptación: Lizette viajará desde Chiapas a finales de julio y se quedará con su mamá mientras encuentra alojamiento, y Anna Sofía busca una habitación cerca del campus para evitar cinco horas diarias de traslado desde Ecatepec.
Mirar al futuro con esperanza
Estas cuatro personas simbolizan la enorme diversidad y el potencial de México: desde Ecatepec, Chiapas y Ciudad de México, han demostrado que el talento se construye con esfuerzo sostenido. Su historia es un recordatorio poderoso de que, aunque el camino sea largo, la perseverancia y la convicción son ingredientes clave para alcanzar los sueños.
Que sus experiencias inspiren a miles de jóvenes que sueñan con la UNAM: con disciplina, constancia y ganas de seguir intentándolo, todo es posible.
Su paso por la UNAM apenas comienza. El ciclo escolar inicia el 11 de agosto de 2025. Seguro que sus próximos capítulos estarán llenos de aprendizaje, crecimiento y nuevas metas por alcanzar.
