Un tiroteo registrado este jueves al mediodía en el campus de la Universidad Estatal de Florida (FSU, por sus siglas en inglés) dejó al menos seis personas hospitalizadas, una de ellas en estado crítico, según informaron autoridades médicas locales. Las fuerzas de seguridad detuvieron a un sospechoso, aunque los detalles sobre su identidad y motivos aún no han sido revelados.
Una fuente con conocimiento del caso confirmó a la agencia Associated Press que una persona está bajo custodia, pero pidió mantener el anonimato por no estar autorizada para hablar públicamente sobre la investigación, la cual sigue en curso.
De acuerdo con un portavoz del Tallahassee Memorial Healthcare, una víctima se encuentra en estado crítico, mientras que los demás heridos presentan condiciones graves. Aún no se han dado a conocer detalles específicos sobre la naturaleza de sus lesiones.
El incidente ocurrió cerca del centro estudiantil, en la zona oeste del campus universitario, cuando la FSU emitió una alerta de tirador activo, lo que desencadenó una respuesta inmediata de cuerpos de emergencia, incluidos camiones de bomberos, ambulancias y unidades policiales de diversas agencias.
En medio del caos, cientos de estudiantes evacuaron la zona. Algunos corrieron mientras otros buscaban refugio o se comunicaban con familiares. “En ese momento, era cuestión de sobrevivir”, contó Ryan Cedergren, estudiante de comunicaciones de 21 años, quien se escondió junto con unas 30 personas en una bolera ubicada en el nivel inferior del centro estudiantil. A los 15 minutos, fueron escoltados por la policía universitaria fuera del edificio.
Otro estudiante, Joshua Sirmans, de 20 años, se encontraba en la biblioteca principal cuando comenzaron a sonar las alarmas. Él y otros compañeros fueron evacuados con las manos sobre la cabeza, según relató.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, reaccionó a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), escribiendo: “Nuestras oraciones están con nuestra familia de la Universidad Estatal de Florida y la policía estatal está respondiendo activamente.”
En tanto, la secretaria de Justicia de Florida, Pam Bondi, informó que el Departamento de Justicia está en contacto con agentes del FBI que ya se encuentran en el lugar colaborando con las investigaciones.
La universidad aún no ha emitido un comunicado oficial ampliando detalles sobre el agresor o los motivos detrás del ataque, mientras que las actividades en el campus han sido suspendidas hasta nuevo aviso.
