Opinión Por: Yesenia Valdez
EMERGENCIA NACIONAL, UNA ERA QUE YA TENIA FECHA DE EXPIRACIÓN
El día llegó y la toma de protesta de Donald Trump como presidente de Estados Unidos ha generado un gran impacto en la relación entre Estados Unidos y México, tal y como era de esperarse debido a la situación económica que vive México. Durante su discurso inicial, Trump anunció varias medidas que afectarán, si asi como lo representa el significado de esta palabra… afectarán directamente a México, y que han generado una gran preocupación en el gobierno y los millones de familias de la sociedad mexicana.
Una de las medidas más polémicas anunciadas por Trump fué la declaratoria de “Emergencia Nacional” en la frontera sur de Estados Unidos, lo que implica el despliegue de militares y la Guardia Nacional para frenar la migración ilegal y el tráfico de drogas. Esta medida ha sido criticada por el gobierno mexicano, que considera que es una violación de la soberanía nacional y que puede generar una mayor tensión en la relación bilateral, pero que innegablemente era algo que ya venía rebasando la estabilidad de los Estados de la zona fronteriza tanto de México como de Estados Unidos, resulta indagador el mecanismo que se tomara por parte del Gobierno Mexicano para afrontar estas medidas, ya que hasta el momento un programa económico de apoyo muy muy limitado no resuelve ni el problema de los inmigrantes deportados, ni el problema que esto representa para sus familias ni el problema que en términos finales representa para la economía de México.
Otra medida anunciada por Trump es la imposición de aranceles del 25% a las importaciones mexicanas, lo que puede generar un gran impacto en la economía mexicana. Esta medida ha sido criticada por los sectores empresariales y agrícolas mexicanos que exportan más del 80% hacia Estados Unidos y que consideran que se puede generar una pérdida de competitividad y por lógica natural una disminución de las exportaciones, y realmente es tan irónico querer competir en una escala igualitaria cuando los porcentajes de exportaciones son claramente muy diferentes con los porcentajes de importación de Estados Unidos hacia México de tan solo 16 %, esto solo refleja la falta de un análisis de la situación económica real que pone al día de hoy a todos los mexicanos y no solo a los empresarios sino a las familias en general en un grado de alta vulnerabilidad por la fallida o dicho de una manera más acertada, por la falta de una política económica que resuelva desde ya hace mucho las necesidades de los mexicanos para contar con las actividades económicas que pudieran propiciarles a los mexicanos una mejor calidad de vida evitando asi el nivel tan alto de migración.
Trump también anunció que considerará a los cárteles mexicanos como “organizaciones terroristas”, aunque se ha coincidido por diferentes voces líderes de opinión, especialistas y por la sociedad en general como una oportunidad para generar una mayor cooperación entre los gobiernos de Estados Unidos y México en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, esta medida también ha sido criticada por algunos sectores que consideran que puede generar una mayor militarización de la frontera y una “violación de los derechos humanos”, sobre todo si no es aplicada de una manera encauzada al objetivo real que es la recuperación de la Seguridad Nacional para ambos países.
En cuanto a la relación comercial entre Estados Unidos y México, Trump anunció que buscará renegociar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), lo que puede generar una mayor “incertidumbre” en la relación comercial bilateral. Sin embargo, también es posible que esta renegociación pueda generar una mayor cooperación y una mayor integración económica entre los tres países, basándonos en los temas en materia de combate al narcotráfico y las decisiones que asuma el gobierno mexicano para ferenar la migración ilegal país vecino, ya que la asignación de aranceles de hasta el 25 % a las importaciones mexicanas puede generar un gran impacto en la economía mexicana.
Al final, la toma de protesta del nuevo mandatario Donald Trump como presidente de Estados Unidos ha generado curiosamente un gran impacto en la relación entre Estados Unidos y México, excluyendo por el momento medidas radicales con otras naciones como se hubiera podido esperar. Y en términos finales aunque las medidas anunciadas por Trump pueden generar una mayor tensión en la relación bilateral, también es posible que puedan generar una mayor cooperación y una mayor integración económica entre los dos países, lo que terminaría, tal vez, en una inesperada relación de cooperación para el beneficio de millones de familias que residen en ambos países.
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