Varios de los principales museos administrados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la capital del país permanecieron cerrados este martes sin previo aviso, provocando sorpresa y molestia entre visitantes nacionales y extranjeros. El motivo oficial: “causas de fuerza mayor”. Sin embargo, testimonios de trabajadores apuntan a una razón concreta: la ausencia de personal de seguridad tras un cambio de empresa encargada del resguardo de los recintos.
Entre los espacios afectados destacan el Museo Nacional de Antropología, el más visitado del país, así como el Museo Nacional de Historia en el Castillo de Chapultepec, el Museo del Templo Mayor, la Galería de Historia Museo del Caracol, el Museo de El Carmen y el Museo Nacional de las Intervenciones.
Los anuncios del cierre fueron colocados tanto en las entradas de los recintos como en redes sociales, donde incluso los propios trabajadores expresaron su inconformidad. En cartulinas colocadas en accesos, podían leerse mensajes como: “Los trabajadores del museo responsabilizamos al director general y al titular de seguridad por dejar a la deriva la custodia y seguridad del patrimonio cultural de la nación, así como la seguridad del personal que labora en los recintos del INAH.”
De acuerdo con testimonios recabados en el lugar, como el del guía y profesor Jesús Torres en el Castillo de Chapultepec, el cierre responde a un conflicto derivado del cambio de proveedor de seguridad.
Testigos en el Museo Nacional de Antropología reportaron incluso el desalojo del público alrededor del mediodía.
Horas más tarde, el INAH emitió un comunicado confirmando que los cierres están relacionados con el proceso de transición entre empresas de seguridad, tras el fallo de una licitación federal emitido el pasado 30 de mayo. Según la dependencia, a partir del 1 de junio inició la entrega de servicios a las nuevas compañías adjudicadas, lo que motivó el cierre temporal de ciertos recintos “con el fin de garantizar una transición ordenada y salvaguardar el patrimonio”.
El comunicado señala que se espera que las condiciones de seguridad estén restablecidas a partir del miércoles 4 de junio, y que de no cumplirse lo pactado, se aplicarán sanciones administrativas a las empresas responsables.
Mientras tanto, visitantes que llegaron este martes a los museos se retiraron con desilusión, sin información clara sobre la fecha de reapertura ni canales oficiales de consulta, evidenciando una vez más la fragilidad operativa de las instituciones culturales en el país.
