El día de ayer, después del atentado contra el aspirante republicano Donald Trump, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se unió al clamor nacional en un llamado vehemente a condenar toda forma de violencia política.
Fue en un mensaje a la nación norteamericana directo desde la Casa Blanca, que Biden instó a los ciudadanos a resolver sus diferencias ideológicas de manera pacífica, enfatizando que no existe espacio para este tipo de violencia.
“Debatimos y discrepamos, pero resolvemos nuestras diferencias en las urnas; así lo hacemos: en las urnas, no con balas (…) no existe espacio para este tipo de violencia”, sentenció el mandatario, en un mensaje directo a todo Estados Unidos.
El demócrata, también dio a conocer que habló brevemente por teléfono con Trump, a la vez que anunció una investigación exhaustiva sobre el atentado ocurrido durante un mitin en Pensilvania. Este incidente ha generado críticas hacia el servicio secreto por una presunta falla en la seguridad del ex presidente y sus familiares, situación que Biden se comprometió a esclarecer con rigurosidad.
Mientras el presidente Biden optó por permanecer en Washington y suspender temporalmente sus anuncios de campaña, Trump continuó con su agenda política, haciendo énfasis en la necesidad de proteger la integridad de los procesos democráticos y la seguridad de todos los ciudadanos involucrados en el proceso electoral.
