En Movimiento Ciudadano dejaron claro que el verdadero mérito por las modificaciones a la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión no fue de ellos, ni de Morena… sino de la gente. Con tono más de testigo que de protagonista, los naranjas celebraron que, por primera vez, se abrieran foros y se atendieran las preocupaciones ciudadanas, como el bloqueo de redes o el uso indebido de datos personales. Dicen que se metieron más de 80 cambios al dictamen —incluyendo eliminar el temido artículo 109— y que ahora la CURP biométrica va con esteroides legales: lista para incorporar programas sociales, recibos y otros trámites.
MILAGRO FISCAL DE ÚLTIMA HORA
El INE, con su ya famosa flexibilidad quirúrgica, le perdonó a los partidos políticos más de 33 millones de pesos en multas por irregularidades fiscales. ¿La razón? Según el instituto, corrigieron “de último minuto” sus omisiones. Hace apenas unos días, la multa era de más de 65 millones por no pagar impuestos, reportar cifras distintas al SAT, deberle al Infonavit, e incluso tener adeudos con gobiernos estatales. Pero bastó un pequeño ajuste —y tal vez una buena dosis de “gestión política”— para que la sanción se redujera a menos de la mitad. En corto, todo indica que en este país los partidos políticos tienen su propio SAT: uno que sí perdona, si sabes mover las piezas correctas.
TRUMP PRESUME FRONTERA DE HIERRO
La Casa Blanca no perdió la oportunidad de sacar músculo: en junio, los cruces irregulares de migrantes por la frontera con México se desplomaron a cifras que no se veían desde hace seis décadas. Según datos preliminares del Departamento de Seguridad Interna de EU, apenas se registraron 6 mil 70 detenciones en todo el mes. La administración Trump atribuyó el “milagro fronterizo” a su política de mano dura: despliegue militar, cierre del acceso al asilo y una narrativa que raya en el estado de excepción permanente. Kristi Noem, secretaria de Seguridad Interna, soltó la frase del día: “Tenemos la frontera más segura de la historia”. Eso sí, del costo humano de esta seguridad, no se habló. Como suele pasar, la estadística gana titulares… y los migrantes, el silencio.
