La poeta Coral Bracho recibió este 19 de noviembre de 2025 la Medalla Bellas Artes de Literatura, el máximo reconocimiento que otorgan la Secretaría de Cultura federal y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) a las figuras más destacadas de las letras mexicanas. La ceremonia, realizada en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, reunió a colegas, autoridades culturales y lectores que celebraron una trayectoria fundamental para la poesía contemporánea en México.
Conmovida, Bracho evocó sus primeras visitas al Palacio de Bellas Artes, cuando de niña asistía con su familia a conciertos y exposiciones que, dijo, despertaron una sensibilidad que marcaría su destino literario. Recordó también sus años de formación en Letras Hispánicas en la Universidad Nacional Autónoma de México, donde descubrió el impulso poético que definió su escritura. “Las palabras surgían como presencias sugerentes que respondían a aquello que buscaba expresar, así como a un ritmo o movimiento, a una sonoridad, a un peso y a una secuencia plástica dictadas con precisión desde lo más hondo de mí”, afirmó durante su discurso.
La autora subrayó la necesidad de la sensibilidad artística en un momento global especialmente frágil. “Vivimos ahora un momento de la historia de la humanidad vulnerable como pocos… y como nunca necesitamos de la sensibilidad y la mirada que el arte y la cultura nos proporcionan”, expresó ante el público que acompañó su reconocimiento.
En el presídium estuvieron presentes la directora general del INBAL, Alejandra de la Paz; la coordinadora nacional de Literatura, Nadia López García; el poeta Eduardo Casar, representante del jurado; y la escritora Miriam Moscona, quienes destacaron la trascendencia estética y humana de la obra de Bracho. De la Paz señaló que su escritura recuerda “el valor de la palabra como espacio sensible de reflexión y memoria”, y agradeció a la poeta por transformar la realidad a través del lenguaje. “Que este premio acerque tu valiosa obra a más lectores y lectoras… y que recuerde el lugar ubicuo de la poesía”, añadió.
López García subrayó la pureza del lenguaje y el rigor estético de Bracho, así como la capacidad de su voz para abrir una profundidad sensorial atenta a lo humano y al entorno. Eduardo Casar rememoró sus primeras lecturas de la autora y destacó la manera en que la luz, tema recurrente en su poesía, obliga a imaginarla desde una experiencia renovada. Miriam Moscona, por su parte, resaltó la potencia musical de su obra y la centralidad del agua como elemento que articula su universo poético. “No conozco un solo verso fallido en la obra de Coral Bracho… como abrir la llave del agua y meter la cabeza”, dijo, y enfatizó su compromiso ético con el país, la naturaleza y la condición humana.
Nacida en la Ciudad de México en 1951, Coral Bracho ha construido una obra esencial para la poesía en lengua española. Estudió Lengua y Literatura Hispánicas y ha publicado en revistas, suplementos y antologías dentro y fuera del país. Su voz, reconocida por su intensidad sensorial, musicalidad y originalidad, le ha valido premios como el Nacional de Poesía Aguascalientes en 1981, el Xavier Villaurrutia en 2003, el Internacional de Poesía Jaime Sabines–Gatien Lapointe en 2011, el Poetas del Mundo Latino Víctor Sandoval en 2016 y el XXI Premio Internacional Federico García Lorca en 2024.
Con la Medalla Bellas Artes de Literatura 2025, Bracho suma un nuevo reconocimiento a una trayectoria que ha iluminado a generaciones de lectores y que reafirma su lugar como una de las voces más significativas de la poesía mexicana contemporánea.
