Este miércoles, el enfrentamiento entre el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, y el líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro “Alito” Moreno, tomó un giro aún más confrontativo, con ambos actores políticos intercambiando duras críticas y calificativos, elevando la tensión en la arena política.
El conflicto comenzó cuando Moreno Cárdenas, en un discurso reciente, calificó a Fernández Noroña de “payaso” y sugirió que debería estar internado en un manicomio. Este comentario desató la respuesta inmediata del senador morenista en una conferencia de prensa, donde al principio trató de restarle importancia al asunto con un intento de descalificación diplomática. “Águila no caza mosca”, dijo Fernández Noroña, buscando minimizar las provocaciones.
Sin embargo, el legislador de Morena no tardó en responder con contundencia. “Yo no sé si por manicomio, el senador Moreno piense en el comportamiento de la oposición. Entonces, no me atañe. Y si habla literal de un manicomio, yo lo único que tendría que decir es que estoy absolutamente cierto de que yo no acabaré en un manicomio, y estoy absolutamente cierto que él acabará en la cárcel”, dijo, lo que aumentó la polarización entre ambos líderes.
En el Senado, comenzó la guerra entre Gerardo Fernández Noroña y Alejandro Moreno.
— Angel Gallegos (@gallegoso) March 12, 2025
Alito dijo que Noroña es una "gran p3nd3j0" y una vergüenza para la cámara alta.
"Águila no caza mosca", respondió este miércoles Fernández Noroña, quien afirmó que verá a Alito en la cárcel pic.twitter.com/6bAHKX38lq
Minutos después, en una entrevista con medios de comunicación, Alejandro Moreno reaccionó con furia a las palabras de Fernández Noroña, calificándolo de “pendejo” y tildando su comportamiento de una “aberración” y “un ridículo para el Senado de la República”.
Asimismo, Moreno Cárdenas no dudó en utilizar un lenguaje fuerte y directo para expresar su desacuerdo: “Y lo digo en ese lenguaje duro, soez, claro y contundente porque así nos entendemos. El pueblo de México sabe lo que quiero decir. Tristemente es una vergüenza, lo que representa para el Senado de la República”, manifestó.
Este incidente pone de manifiesto la creciente polarización política en el país, donde los intercambios verbales entre los líderes de los principales partidos políticos se han intensificado en los últimos meses. Ambos políticos han sido figuras clave en el Senado, pero sus diferencias y acusaciones mutuas continúan atrayendo la atención de los medios y del público en general.
El choque no parece tener una solución a la vista, lo que solo augura más confrontaciones en un contexto político cada vez más tenso en México.