La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel, anticipó que la discusión del proyecto que busca invalidar parcialmente la reciente reforma judicial podría desencadenar un conflicto con los otros Poderes de la Unión.
En una reciente entrevista con Víctor Hugo Michel para Milenio TV, Yasmín Esquivel realizó esta declaración, en vísperas de la votación programada para este martes 5 de noviembre.
El proyecto, impulsado por el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, plantea la posibilidad de que el máximo tribunal revise la constitucionalidad de la reforma. En este sentido, Esquivel subrayó que el debate principal radicará en la facultad de la SCJN para analizar enmiendas constitucionales.
Según expuso, la Corte podría enfrentarse a un conflicto con los poderes Ejecutivo y Legislativo si se determina la invalidación de lo aprobado por el Congreso y promulgado por el Ejecutivo.
“Si tenemos competencia o no, un Tribunal Constitucional, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para revisar y analizar reformas constitucionales, entonces eso es un aspecto muy importante. Si el Tribunal Constitucional puede o no analizar lo que dice la propia Constitución, y si nosotros somos garantías de que se respeta la Constitución, hasta dónde podemos analizarla”, explicó Esquivel.
En su intervención, la ministra destacó que los precedentes de la SCJN sostienen la posición de que el tribunal no cuenta con las facultades para examinar reformas constitucionales, ya que la Carta Magna no contempla esta atribución para el máximo órgano judicial.
“En ninguna parte de la Constitución se establece que podemos revisar las reformas constitucionales, aquello que el poder reformador de la Constitución desarrolló”, explicó Esquivel.
A su juicio, Esquive manifestó que una decisión de la SCJN que contradiga lo aprobado por el poder reformador podría generar efectos negativos para el país en términos sociales, políticos y económicos.
“Esperaría que el próximo martes haya mesura y prudencia por parte de la ministra y los ministros, y que no se invalide una reforma constitucional, ya que entraríamos en un enfrentamiento con los otros dos poderes. Una resolución que pretenda invalidar lo determinado por dos Poderes de la Unión me parece que no abona en la construcción de las instituciones”, subrayó.
Respecto a la votación, Esquivel consideró improbable que se logren los ocho votos necesarios para declarar la inconstitucionalidad de la reforma, ya que, afirmó, el bloque de ministros que usualmente se pronuncia en contra de invalidar reformas constitucionales ha mostrado consistencia en este criterio.
“Es un bloque que cinco de los ministros y ministras que participan en la próxima votación se han decantado porque es improcedente las acciones de inconstitucionalidad en contra de las reformas constitucionales. Entonces, si hay consistencia en los precedentes de las ministras y ministros, como han votado en 2016 y en años posteriores, pues no debieran darse cuenta de los ocho votos para que proceda la acción de inconstitucionalidad y se llegue a la invalidez que se está planteando en algunos de sus aspectos de la reforma constitucional”, respondió al ser cuestionada sobre una posible ruptura de esta tendencia.
Finalmente, la ministra alertó sobre los riesgos de una crisis constitucional si la SCJN decidiera avanzar con una resolución en contra de la reforma. Según Esquivel, esta situación podría derivar en una resolución inejecutable y profundizar la tensión entre el Poder Judicial y los otros Poderes de la Unión, con potenciales consecuencias para la estabilidad institucional del país.