La madrugada de este martes, una fuerte explosión sacudió la zona oriente de Culiacán, Sinaloa, específicamente en la comunidad Limita de Itaje, dejando una camioneta Pick Up completamente calcinada y desatando una serie de versiones contradictorias sobre el origen del estallido.
El incidente, que ocurrió alrededor de las 3:20 de la mañana, estuvo acompañado de detonaciones de armas de fuego y la aparición de columnas de humo, generando alarma en la población local.
Tras la explosión, se encontró una camioneta Pick Up completamente quemada, y en su interior se localizó un fusil Barrett-50, púas de acero para ponchar llantas, y restos de un dron en las inmediaciones. Los vecinos de la zona reportaron haber escuchado las detonaciones de armas de fuego antes de sentir una fuerte vibración ocasionada por la explosión.
Por su parte, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Omar García Harfuch, fue el primero en ofrecer detalles sobre lo ocurrido. Durante la conferencia mañanera del martes en Palacio Nacional, el funcionario descartó que se tratara de un “coches bomba” y aseguró que la explosión fue provocada por un dron.
El secretario de seguridad de Sinaloa dice que fue el tanque de gasolina el que provocó el incendio de un auto en Culiacán y no un drone como había adelantado el secretario Omar García Harfuch pic.twitter.com/ij48J6Ae9F
— Azucena Uresti (@azucenau) December 3, 2024
“No ha sido un coche bomba, al parecer es un artefacto tipo dron. No hubo heridos, fue en un ejido a las afueras de Culiacán y se descarta que haya sido un coche bomba”, declaró García Harfuch.
Sin embargo, horas después, el secretario de Seguridad en Sinaloa, Gerardo Mérida Sánchez, desmintió esta versión. En una conferencia de prensa, Mérida Sánchez aseguró que todo apuntaba a que la explosión fue causada por un incendio en el tanque de gasolina de la camioneta, descartando por completo la posibilidad de un dron o coche bomba debido a las características del daño sufrido por el vehículo.
La situación se complicó aún más cuando, más tarde, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ofreció una versión distinta. Rocha Moya contradijo a su propio secretario de Seguridad estatal y, basándose en el dictamen de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana federal, afirmó que la explosión fue provocada por un petardo operado por un dron.
Con tres versiones diferentes sobre el origen de la explosión, el caso ha generado confusión y preocupación en la comunidad. Ahora, será la Fiscalía General del Estado de Sinaloa la encargada de esclarecer los hechos y determinar, con base en las pruebas recolectadas por los peritos, el verdadero origen de la detonación que causó la destrucción de la camioneta y que sigue siendo un misterio.