El pasado lunes, un acto de violencia ocurrido en la alcaldía Iztapalapa ha conmocionado a la opinión pública. Fátima “Z”, una joven de 13 años y estudiante de la Escuela Secundaria Diurna No. 236, fue arrojada desde varios metros de altura por algunos de sus compañeros, presuntamente debido a su afición por el K-pop, un género musical originario de Corea del Sur. Este ataque no solo ha generado indignación a nivel local, sino también en la comunidad internacional, recibiendo el rechazo de la Embajada de Corea en México y de diversos grupos de fans del K-pop en el país.
A través de un comunicado emitido en su cuenta de X (antes Twitter), la Embajada de Corea en México expresó su firme rechazo hacia el acto de violencia. En el mensaje, la diplomacia coreana recordó que los valores promovidos por el K-pop son los de la activación física, la diversidad, la inclusión y el sano esparcimiento juvenil, subrayando que la música y la cultura no deben ser motivo de rechazo ni de violencia.
Además, instaron a las autoridades mexicanas a prestar atención a cualquier acto de acoso escolar o en comunidades, instando a la prevención y sanción de estos casos.
#JusticiaParaFatima:
— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) February 15, 2025
Por quienes comparten el caso de Fátima, una niña de secundaria que sufría de acoso por ser fan del k-pop y fue arrojada desde un segundo piso. pic.twitter.com/Nk4CxFJfCX
El Centro Cultural Coreano en México también se unió al rechazo por este lamentable suceso, destacando la importancia de la tolerancia y el respeto por las diversas expresiones culturales, entre ellas el K-pop. En un comunicado, se hizo un llamado a las autoridades educativas y a la sociedad en general para erradicar cualquier forma de discriminación basada en los gustos y pasiones personales.
Fans de K-pop exigen justicia para Fátima
La comunidad mexicana de fanáticos del K-pop, que ha crecido considerablemente en los últimos años, no tardó en manifestarse en redes sociales exigiendo justicia por la agresión sufrida por Fátima. A través de cuentas de fanbase de grupos como BTS, Blackpink y otros artistas coreanos, miles de seguidores de la cultura coreana expresaron su enojo y tristeza por el ataque.
Por otro lado, algunos otros apasionados por esta cultura unieron al clamor de justicia, mencionando que lo que para la afectada era una pasión y una forma de expresarse, se convirtió en el blanco de burlas y agresiones, y aseguraron que este incidente no es aislado y que muchos jóvenes que siguen el K-pop han sido víctimas de discriminación y violencia, simplemente por ser diferentes.
El caso de Fátima ha puesto en evidencia la persistente violencia y discriminación que enfrentan los jóvenes por sus gustos personales, en especial aquellos que se apartan de los patrones tradicionales de la sociedad. A medida que la historia de Fátima sigue resonando en redes sociales y medios de comunicación, se reaviva el debate sobre la importancia de fomentar la tolerancia, el respeto a la diversidad y la erradicación del bullying en las escuelas.