Un equipo de investigadores de la UNAM, el INAH y la UASLP anunció un hallazgo extraordinario: los fósiles de un bebé mamut Columbino (Mammuthus columbi) que vivió hace más de 13 000 años en San Luis Potosí, cerca de El Cedral.
¿Quién era “Lily”?
La cría, denominada “Lily”, tenía alrededor de 5 meses cuando falleció después de quedar atrapada en un suelo pantanoso durante una sequía. El fósil fue descubierto en 2016 en Rancho Carabanchel, muy cerca del sitio de El Cedral, San Luis Potosí y vivió en el Pleistoceno tardío, periodo que abarca de hace aproximadamente 126 mil a 11 mil 700 años.

¿Qué comía este bebé mamut?
Gracias a sofisticados análisis de isótopos estables —en esmalte dental, colágeno y colmillos— los científicos determinaron que su dieta era mixta y estaba basada en leche materna: aún estaba en etapa de lactancia, y plantas: comenzó a comer pastos (C₄), hojas de arbustos y árboles (C₃), raíces e incluso corteza de troncos jóvenes.
Este patrón de alimentación se confirma también con análisis químicos que identifican las rutas fotosintéticas de las plantas consumidas.

¿Por qué es importante?
Es la primera vez que se caracterizan los hábitos alimentarios de un mamut bebé en el país; revela cómo los mamuts se adaptaban a las condiciones climáticas del Pleistoceno tardío (hace entre 126 000 y 11 700 años); y las marcas en sus huesos sugieren que cazadores-recolectores aprovecharon la carroña, lo que ayuda a entender la interacción entre humanos y mamuts.
El grupo, liderado por los paleontólogos Víctor Adrián Pérez Crespo y Gilberto Pérez Roldán, planea además realizar análisis de estroncio para conocer sus patrones de desplazamiento, y profundizar en los estudios de ADN antiguo, lo cual podría revelar sus parentescos genéticos y migraciones.
En resumen, este hallazgo no solo nos acerca a la tierna etapa infantil de un mamut, sino que también abre nuevas ventanas para comprender el clima, los paisajes y la vida humana del pasado en nuestro país.