Cada 28 de diciembre, México y varios países de habla hispana celebran el Día de los Santos Inocentes, una jornada marcada por la broma y la risa. Pero, ¿Cuál es el origen de esta curiosa tradición que invita a jugarle una que otra broma a amigos y familiares?
La celebración tiene raíces bíblicas que se remontan al relato del Evangelio de Mateo. Según la historia, el rey Herodes, temeroso del nacimiento de un nuevo rey que podría amenazar su trono, ordenó la matanza de todos los niños menores de dos años en Belén. Este trágico episodio es recordado en la tradición católica como el Día de los Santos Inocentes, en honor a aquellos infantes que perdieron la vida.
Con el tiempo, esta conmemoración se transformó en una festividad más ligera. La idea de hacer bromas y engaños se popularizó, convirtiendo el día en un momento de diversión. En México, es común que amigos y familiares se hagan “inocentadas”, que son bromas de carácter juguetón, como hacer creer a alguien que ha ganado un premio o que ha olvidado un evento importante.
28 de diciembre
— Ale (@Cova1902) December 28, 2023
Día de los Santos Inocentes.
Son aquellos niños que Herodes mandó asesinar en su deseo desesperado de matar al Mesías.
Puedes leerlo en Mateo 2, 13-16 pic.twitter.com/pvGGO0jAw2
Las redes sociales han dado un nuevo giro a esta celebración, permitiendo que las bromas se extiendan más allá del ámbito familiar. Empresas y figuras públicas también se suman a la tradición, creando noticias falsas o anuncios absurdos para sorprender a sus seguidores.
Aunque el Día de los Santos Inocentes tiene un trasfondo trágico, en la actualidad se ha convertido en una ocasión para fomentar la risa y la camaradería. Sin duda, es un recordatorio de que, a pesar de las adversidades, el humor puede ser una herramienta poderosa para unir a las personas y hacer más llevadera la vida cotidiana. ¡Prepárate para las risas y no olvides estar alerta ante las posibles inocentadas!