Las recientes redadas migratorias efectuadas el pasado viernes por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Los Ángeles han desatado una ola de protestas y tensiones en varios puntos de la ciudad, tras la detención de al menos 44 personas, entre ellas 11 ciudadanos mexicanos, según confirmó Carlos González Gutiérrez, cónsul general de México en esta ciudad.
Las operaciones se realizaron en al menos siete ubicaciones, incluyendo un Home Depot, un complejo de departamentos, edificios judiciales federales y el popular distrito de la moda. Según reportes de The Associated Press, los agentes de ICE actuaron en coordinación con personal de la Patrulla Fronteriza, siguiendo las nuevas directrices del gobierno federal que busca intensificar el control migratorio y las deportaciones.
Todd Lyons, director regional de ICE, defendió los operativos afirmando que “se realizaron conforme a la ley y con medidas de seguridad necesarias”. Aseguró que el uso de equipo táctico, incluyendo máscaras protectoras, busca garantizar la integridad de los oficiales y sus familias en un contexto cada vez más tenso.
Escalada de protestas
Las redadas provocaron una inmediata respuesta de la comunidad. El sábado, manifestantes se congregaron en la ciudad de Paramount, bloqueando el tráfico sobre Paramount Boulevard y expresando su rechazo a lo que consideran “tácticas de intimidación y criminalización de comunidades trabajadoras”.
La situación se intensificó frente a un centro de detención federal en el área metropolitana de Los Ángeles, donde miles de personas se manifestaron. Las protestas desembocaron en un fuerte operativo policial que incluyó el uso de gases lacrimógenos, granadas aturdidoras y el arresto de varias personas, entre ellas un reconocido líder sindical, según informó Telemundo 52.
En paralelo, la Patrulla de Carreteras de California reportó que un grupo de manifestantes intentó marchar hacia la autopista 710 con la intención de bloquearla, sin lograrlo. Una persona fue trasladada a un hospital cercano, aunque no se han dado a conocer detalles sobre su estado de salud.
Organizaciones civiles y defensores de los derechos de los migrantes han criticado duramente la forma en que se llevaron a cabo los operativos, señalando que generan miedo, fragmentan familias y violan derechos fundamentales. Por su parte, el consulado mexicano indicó que está brindando asistencia legal y consular a los 11 connacionales detenidos, y ha hecho un llamado a las autoridades estadounidenses para garantizar el respeto al debido proceso.
Las tensiones persisten en la ciudad, y diversos colectivos han anunciado más movilizaciones en los próximos días, en defensa de los derechos de los migrantes y en protesta por lo que consideran un uso excesivo de la fuerza por parte del gobierno.
