El senador Luis Donaldo Colosio Riojas, exalcalde de Monterrey y una de las figuras más visibles de Movimiento Ciudadano, lanzó una declaración que sacude el panorama político estatal: “MC tiene suficiente fuerza para ir solo en Nuevo León”. La frase no solo refleja confianza, también abre la puerta a un debate sobre la viabilidad de que el partido naranja compita en solitario en un estado clave para su proyecto nacional, tomando en cuenta el crecimiento del partido en los últimos años, no solo en el estado sino en el país.
Respondiendo a cuestionamientos respecto a una posible alianza con otros partidos como el PAN, Colosió respondió: “Creo que se debe analizar caso por caso para determinar si realmente son compatibles”, argumentó “De lo contrario, que cada quien siga su propia dinámica, como ya ha sucedido en varias ocasiones en Nuevo León, donde los desencuentros políticos terminan por estancar el ejercicio público. En general para eso sirven las alianzas, y no sólo para fines electorales. Y si el propósito es meramente electoral, Movimiento Ciudadano es una fuerza suficientemente competitiva por sí misma”.

Colosio, heredero de un apellido cargado de simbolismo en la política mexicana, ha construido en los últimos años una carrera propia que lo ha colocado como referente dentro de MC. Su gestión en Monterrey, junto con el respaldo del gobernador Samuel García, lo ubican como una pieza central en la estrategia del partido en la entidad. Su voz, por tanto, no es menor: cuando afirma que Movimiento Ciudadano puede prescindir de alianzas, habla desde la posición de un dirigente con peso real en la toma de decisiones.
El terreno en el que se mueve MC en Nuevo León es fértil. Desde 2021, con la llegada de Samuel García a la gubernatura, el partido consolidó una presencia inédita en la historia reciente del estado. Hoy gobierna 16 de los 51 municipios, lo que lo convierte en la fuerza con mayor número de alcaldías bajo su control. En esa lista destacan ciudades de relevancia metropolitana como Guadalupe, Santa Catarina y Cadereyta, además de bastiones emergentes como Salinas Victoria. Esta red de gobiernos municipales, sumada al poder estatal, ha permitido que Movimiento Ciudadano se presente como un proyecto con músculo propio.

En ese contexto, las palabras de Colosio adquieren un carácter estratégico. La apuesta por competir sin coaliciones implica confianza en la fuerza electoral que el partido ha tejido en los últimos años, pero también conlleva riesgos. El PAN y el PRI mantienen estructuras vivas en el estado, mientras que Morena busca abrirse paso en un terreno históricamente adverso. La fragmentación del voto opositor podría favorecer a unos y debilitar a otros, un escenario que Colosio parece dispuesto a enfrentar con la convicción de que su partido puede salir fortalecido.
El senador no solo habla como político local, sino como un referente nacional que ha despertado expectativas más allá de Nuevo León. Su declaración tiene un peso simbólico que trasciende la coyuntura: es un mensaje de independencia, de confianza en un proyecto que ha dejado de ser emergente para buscar consolidarse como fuerza dominante. En la figura de Colosio se concentra buena parte del capital político de Movimiento Ciudadano, y sus palabras parecen delinear el rumbo que el partido tomará de cara a las elecciones por venir.