El programa “Corazón de Mujer”, impulsado por la gobernadora morenista de Morelos, Margarita González Saravia, ha sido cuestionado por representantes de la oposición y por organizaciones feministas por su limitado impacto en la vida de las mujeres. Jessica Ortega, presidenta del Consejo Nacional de Movimiento Ciudadano y coordinadora del partido en Morelos, alzó la voz señalando que “entregar 560 pesos cada dos meses no transforma vidas ni garantiza autonomía”, escribió Ortega en un texto para CongresistasMx.
El programa, dirigido a mujeres entre 55 y 59 años, ofrece una tarjeta que incluye descuentos en laboratorios, farmacias, actividades culturales y negocios locales como cafeterías y ópticas. Sin embargo, Ortega critica que la mayoría de estos establecimientos se encuentran en Cuernavaca, lo cual excluye automáticamente a mujeres en zonas rurales sin acceso a comercios afiliados ni terminales bancarias.
“Empoderar no es dar una tarjeta. Empoderar es garantizar derechos, acceso a servicios, salud, seguridad y condiciones para que las mujeres vivan con dignidad e independencia. Llamar a esto una estrategia de fortalecimiento resulta, en el mejor de los casos, insuficiente y en el peor, una simulación que evita enfrentar las verdaderas causas de la desigualdad”, subrayó Ortega.
📑 Jessica Ortega [@jesi_ortega] escribe sobre el programa "Corazón de Mujer" de Margarita González Saravia [@margarita_gs] gobernadora de Morelos [@GobiernoMorelos] al que considera "propaganda disfrazada de apoyo".
— Congresistas (@CongresistasMex) June 26, 2025
Hablar de empoderamiento o de mejorar la calidad de vida… pic.twitter.com/4W5p2Ms77n
También denunció que la tarjeta no permite retirar efectivo y solo se puede usar en establecimientos con terminal bancaria, por lo que las mujeres que no viven en zonas urbanas quedan fuera automáticamente. También acusó el uso electoral del programa, para terminar diciendo:
“Las mujeres de Morelos no merecen asistencias simbólicas. Merecen justicia, reconocimiento y políticas públicas que estén a la altura de su realidad”.
Empoderar no es condicionar. Empoderar es garantizar salud, trabajo digno, libertad y seguridad para decidir.
Un contexto de retrocesos institucionales
La presentación del programa “Corazón de Mujer” ocurre en un contexto polémico: el cierre del Instituto de la Mujer del Estado de Morelos (IMM), organismo clave para la defensa y promoción de los derechos de las mujeres en la entidad. La desaparición del IMM fue justificada por el gobierno estatal bajo el argumento de “reestructuración administrativa”, pero ha sido percibida por activistas y especialistas como un retroceso institucional que debilita las políticas de género.
En este escenario, la crítica de Ortega adquiere mayor relevancia: en lugar de fortalecer estructuras y programas con enfoque de derechos, se recurre a medidas que, según ella, funcionan más como herramientas de clientelismo electoral que como verdaderos instrumentos de empoderamiento.
En Movimiento Ciudadano expresamos el absoluto rechazo a la decisión anunciada por la Gobernadora Margarita González de desaparecer el Instituto de la Mujer y el IMIPE.
— Jessica Ortega ♀ (@jesi_ortega) June 16, 2025
Es inaceptable que bajo la justificación de “alinearse al Gobierno Federal” se pretenda borrar años de lucha. pic.twitter.com/SwqH4wU40h
¿Asistencia o transformación?
El caso de “Corazón de Mujer” reabre un debate importante sobre el rumbo de las políticas públicas dirigidas a mujeres en México. ¿Son suficientes los apoyos económicos condicionados? ¿O se necesita una transformación estructural que garantice acceso a salud, empleo digno, seguridad y autonomía real?
Con el cierre del Instituto de la Mujer y el lanzamiento de programas de bajo alcance, el gobierno de Morelos se encuentra en el centro de la crítica por parte de voces que exigen dignidad, justicia y no dádivas simbólicas.
¿Puede el gobierno estatal replantear sus políticas para realmente empoderar a las mujeres, o continuará privilegiando la lógica electoral sobre la justicia social?