El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha reafirmado su intención de implementar aranceles del 25% a las importaciones provenientes de México a partir de este sábado. Así lo confirmó este martes Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, quien indicó que la medida también afectará a productos originarios de Canadá, salvo que ambos países adopten medidas concretas para abordar los problemas del tráfico de fentanilo y la inmigración irregular.
Leavitt aseguró que los aranceles siguen programados para entrar en vigor el 1 de febrero, a menos que se logren acuerdos significativos en las negociaciones en curso. Esta postura endurecida forma parte de la estrategia de la administración Trump para presionar a sus socios comerciales a tomar acciones más contundentes frente a problemas que considera prioritarios para la seguridad y economía de Estados Unidos.
El jueves pasado, Trump declaró que había avances en las conversaciones con el gobierno mexicano sobre migración y el tráfico de drogas. “Con México estamos lidiando creo que muy bien y solo queremos ser tratados de forma justa con otras naciones”, señaló el mandatario durante su participación remota en una sesión del Foro Económico Mundial, celebrado en Davos, Suiza.
El presidente también enfatizó que la aplicación de los aranceles no es definitiva y que el gobierno estadounidense está abierto a negociar siempre y cuando se cumplan sus demandas. “Queremos que nuestros socios comerciales sean responsables y colaboren para resolver estos problemas que afectan a todos”, puntualizó.
En Washington D.C. se llevó a cabo la primera conferencia de la vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, quien señaló que sigue vigente la fecha del 1 de febrero para imponer aranceles a México y Canadá. #LasNoticiasDeFORO con @eduardosalazar4 | #nmásforo | #SiempreEnVivo |… pic.twitter.com/DX1LJdIwwF
— N+ FORO (@nmasforo) January 28, 2025
Implicaciones de los aranceles
De implementarse, los aranceles podrían tener un impacto significativo en las economías de México y Estados Unidos, así como en la relación comercial entre ambos países. Expertos advierten que la medida podría encarecer productos clave, desde alimentos hasta autopartes, afectando tanto a los consumidores como a las empresas en ambos lados de la frontera.
Por su parte, el gobierno mexicano ha reiterado su disposición a dialogar para evitar la aplicación de los aranceles y minimizar el impacto económico. En días recientes, representantes de ambos gobiernos han intensificado las reuniones para buscar una solución que satisfaga las demandas de la administración Trump sin perjudicar la estabilidad comercial.