El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó este martes que está esperando escuchar a China antes de que entren en vigor los aranceles de más del 100 por ciento anunciados en días anteriores. Esta declaración sugiere que podría estar dispuesto a entablar negociaciones de última hora con la segunda potencia económica del mundo, en un contexto de creciente tensión comercial entre ambas naciones.
Los mercados financieros mundiales mostraron señales de estabilización tras varios días de volatilidad provocada por los anuncios de Trump sobre los aranceles radicales, que despertaron temores de una recesión global. Después de un desplome que borró billones de dólares en valor de mercado, los índices bursátiles de Estados Unidos comenzaron a mostrar una leve recuperación.
Trump ya ha implementado un arancel del 10 por ciento a casi todas las importaciones que llegan a Estados Unidos, el mayor mercado de consumo del mundo, y para este miércoles se espera la entrada en vigor de aranceles adicionales de hasta el 50 por ciento a muchos de sus socios comerciales. Esta escalada ha elevado las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, que se ha negado a ceder a lo que considera un “chantaje” por parte de Washington.
En respuesta, China prometió “luchar hasta el final”, tras lo que se considera un contraataque a las medidas comerciales de Trump. La disputa intensificó aún más las tensiones cuando el presidente de Estados Unidos amenazó con aumentar los aranceles a un 104 por ciento en represalia a las acciones de Beijing.
#China promete “pelear hasta el final” si #Trump impone mayores aranceles contra Pekín
— DW Español (@dw_espanol) April 8, 2025
Tensiones entre las dos potencias redefinen el comercio global, y amenazan con seguir sacudiendo los mercados en los próximos días. La UE pide negociar para evitar mayores escaladas. /jr pic.twitter.com/eOYiD6YM1w
Pese a la escalada de las tensiones, Trump dio señales de que aún existe la posibilidad de un acuerdo entre ambos países. “China también quiere llegar a un acuerdo, desesperadamente, pero no saben cómo ponerlo en marcha. Estamos esperando su llamada. Ocurrirá”, dijo el mandatario a través de sus redes sociales, sugiriendo que las negociaciones podrían retomarse en cualquier momento.
El impacto de esta guerra comercial no solo afecta a Estados Unidos y China. Decenas de países han comenzado a ofrecer concesiones para evitar los efectos negativos de los aranceles. Según fuentes del gobierno estadounidense, ya han comenzado conversaciones con varios países, incluidos Japón y Corea del Sur, para mitigar los efectos adversos del conflicto comercial.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China continúa siendo una de las principales fuentes de incertidumbre para los mercados globales. Mientras que las medidas arancelarias siguen escalando, las señales de posibles negociaciones por parte de Trump podrían ofrecer un respiro. Sin embargo, los efectos de esta disputa ya están siendo evidentes en los precios de los productos, la planificación empresarial y las expectativas de crecimiento económico, lo que mantiene a los analistas atentos a la evolución de este conflicto.